Muelles de Chiloé: más que una obra arquitectónica

El archipiélago de Chiloé siempre ha sido motivo de mitos, leyendas y creencias fantásticas para sus habitantes, donde el mar ha tenido un rol muy importante en sus costumbres. Hacia estas aguas, algunos muelles -estirados o retorcidos-, han pasado a ser grandes emblemas de la cultura chilota, pero no solo el conocido Muelle de las Almas se encuentra en estas costas.

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Sumérgete en la historia de una de las islas más alegóricas de Chile y descubre los muelles que, esparcidos por el archipiélago, reflejan tradición, cultura y una enorme tranquilidad frente al mar chilote.

Muelle de la Luz

En el año 2000, en los tiempos donde en la zona no existía nada más que bosque, los lugareños vieron luces que aparecieron desde el mar. Tras su construcción, la obra fue nombrada Muelle de la Luz en honor a ese misterio. La leyenda dice que las parejas que suban de la mano hacia el muelle no se separarán jamás. Para llegar hay que atravesar el río Chepu, en dirección a su desembocadura. El muelle, sobre un acantilado, regala grandes vistas hacia el mar y las costas de la zona norte de la isla.

Muelle de las Islas

El Muelle de las Islas es un gran mirador. Situado en una verde pradera de la Isla Mechuque, brinda excelentes vistas hacia las islas Chauques y sus canales. Esta isla ha interiorizado el desarrollo hacia el turismo, lo cual se refleja en la atención de su gente. Aquí encontrarás música típica, bailes tradicionales y preciosas panorámicas. Para llegar debes tomar una embarcación de Quemchi a Tenaún.

Muelle del Tiempo

Pocos saben que 30 minutos al sur del atiborrado Muelle de las Almas, en Punta Pilol, se emplaza el Muelle del Tiempo sobre la ladera de un risco frente al mar. Este particular muelle tiene la figura de un espiral, en el cual puedes sentarte a escuchar el océano y el canto del chucao.

Muelle Refugio del Mar

En la isla Quehui, este muelle poco conocido muestra una forma arquitectónica singular. Se alza como una pasarela de dos metros de altura y cumple una doble función: es un mirador cuando baja la marea y se convierte en un muelle cuando ésta sube. Para llegar puedes tomar una embarcación desde Castro o en el kilómetro 50 en dirección a sector Puchilco cruzar el canal Yal.

Muelle de las Almas

Lejos el más conocido de todos, esta construcción fue hecha en Punta Pirulil basándose fuertemente en una poderosa tradición oral del pueblo de Chiloé. Cuenta la leyenda que por las noches, en los alrededores de Cucao pueden escucharse junto al mar, los llantos y súplicas de las ánimas de almas en pena que vienen hasta Punta Pirulil para esperar al balsero Tempilcahue, encargado de llevar las almas que mueren en tierra al mundo espiritual. Para llegar a él hay que bordear el Parque Nacional Chiloé y atravesar bosques nativos de canelos, arrayanes y abundantes helechos.