Comer bien al Sur

Punta Arenas y Puerto Natales Comer bien al sur

Hay cosas que no pueden dejar de hacerse en una visita a Magallanes. Contemplar, por ejemplo, el urbanismo de Punta Arenas, quizá la ciudad mejor pensada de Chile; un gozo de calles y veredas anchas, como queriendo ostentar todo el espacio vital que provee esa pampa que mira hacia el estrecho de norte a sur. El centro y sus alrededores, cuando se recorren con los ojos del sabor, concentran una vitrina variopinta gracias a los aportes criollos, de autor y de una inmigración centenaria. Así se muestra calidad en restaurantes, cafés y bares esenciales para conocer una zona donde comer bien es costumbre.

Partiendo con un clásico: las empanadas del antiquísimo Bar Saturno. Son similares en forma a las de la zona central, con un pino de grato picor, son hechas con harina argentina y su pequeño tamaño las asemeja a las que comen nuestros vecinos. Deliciosas por cierto. Aquello es parte de los aportes cruzados de distintas culturas a la hora de comer, ya sea en clave popular o como ocurre en el elegantísimo Damiana Elena. Es una casona señorial, ricamente adornada y mejor servida, con platos que aluden a un refinamiento de aire casero; como una invitación al hogar bien plantado de alguien con gusto nostálgico. Unas chuletitas de cordero a la menta, parte de sus especialidades, no puede faltar. Además, la mejor carta de vinos de la ciudad.

Los rasgos de otros territorios suman en sitios como La Marmita. Dos pisos de una casona colorinche, pegada a plaza Sampaio, la puerta de entrada al Barrio Croata de la ciudad. Tiene cerveza de la casa y platos de expresión sencilla y sabrosa, con énfasis en mariscos -ricos caldillos- como también una de las más expresivas cartas vegetarianas disponibles. Un poco más hacia la costa por el mismo barrio, pegado al río de Las Minas, Café Inmigrante es tanto café donde reparte generosos tazones, a la vieja usanza de la zona, aparte de una buena sandwichería y pastelería ad hoc.

La carne es parte del vivir magallánico; la de vacuno y sobre todo la de cordero. Entonces no extrañe que existan parrillas como El Arriero, cerca del viejo club hípico, en cuyos generosos espacios hay porciones ídem de mollejas, cortes clásicos de vacuno y por supuesto el plato estelar: cordero a la llama de leña. Y bueno, no se visita Punta Arenas sin haber pasado por Kiosco Roca. Apreciado como pocos por el habitante de la ciudad, ha sido imitado y jamás igualado. Eso, tomando en cuenta que ellos mismos franquiciaron su marca en otras partes del país, pero parece que al nacer, hace casi 90 años, se rompió el molde: imposible replicar sus panecillos esponjosos y calentitos, embadurnados en una pasta de chorizo jugosa, que se pega a la masa y no sale de ahí. A veces van con mayonesa de la casa y, si se desea, no es obligación, un vasito de leche con plátano. Una suma inverosímil que, entre el frío y el viento, cobra sentido.

Yendo hacia el norte, 250 kilómetros, la pampa magallánica expande inmensidad, frío, soledad. Algo roto por la pequeña Villa Tehuelche y locales sencillos como El Patagón. Nada mal ir por un café y un sándwich simple, para luego dar un paseo por el par de calles que componen ese oasis urbano conectado con la nada. Desde allí se hace más llevadero el viaje a Puerto Natales, mucho más diversa en lo gastronómico que la capital, por eso de ser el pivote a las Torres de Paine.

Nuevamente abundan los detalles, como beber un café de especialidad mirando el devenir ondulante del fiordo y sus montañas cercanas, arropados por Café Kau, que también es tienda outdoor y agencia de turismo. Todo en uno y de calidad. En la zona hay una mezcla de ese espíritu aventurero austral, junto con una pretensión bien lograda de ideas gourmet para el visitante. Aparece en Vinnhaus, con sus líneas europeas que trasladan al comensal fuera del contexto magallánico. Ahí aparece un grato servicio del vino y platos de autor con productos locales, que van desde cremas vegetales a cocciones de cordero de muy buena gama. Aunque si se trata de lujo, las instalaciones de hotel Singular, a unos kilómetros del pueblo, en lo que fuera una peletera y faenadora de carne de inicios del siglo XX, mueve a la fascinación. Es tanto museo como salón para eventos, con habitaciones de clase mundial, extendidas a un comedor amplísimo con cocina a la vista. Allí el chef Hernán Basso trabaja sobre la base técnica francesa clásica, la gran diversidad de productos de la región: pesca, carnes, hierbas, verduras de invernadero, creando un ideario de sabores, como dice su nombre, singular.

Por supuesto hay ideas más sencillas, que con ingenio y técnica destacan. Las masas finas y deliciosas de pizzería La Guanaca, tienen aportes de carnes como las de cordero, centolla, ostiones y otros tantos productos locales, que se despachan rápidamente por un espacio grato y cálido. Además cuentan con una respetable barra cervecera en el segundo piso. Luego, a pocas cuadras de allí, Los Coigües sorprende, porque se trata de un espacio que es casi una taberna -de hecho, ofrece chorrillanas- donde además se muestra una gratísima cocina de carnes llenas de matices porciones generosas.

Para el cierre, el bar. Por eso en uno de los extremos de la zona urbana, cerca del viejo cementerio, Last Hope muestra, de nuevo, la doctrina de la sencillez elegante. Una gran barra trabaja sin cesar, mandando cocteles que no tienen más de tres ingredientes y sin mayor ornamentación. El secreto está en las decenas y decenas de whiskies y gin que las componen. Además elaboran desde hace años un gin de la casa en dos versiones -una con 12 botánicos de la zona y otra con calafate- que aportan el sentido circular del negocio: aquí elaboro, aquí sirvo. Un espíritu independiente, como suele pasar en ese sur bien al sur.

Direcciones:

• Bar Saturno. Colón 756, Punta Arenas. T. +5661 222 1510
• Damiana Elena. Hernando de Magallanes 341, Punta Arenas. T: +5661 2222818. @damiana.elena.restaurant
• El Arriero. Manantiales 759, Punta Arenas. T: +5661 2233451. @elarrieroresto
• Roca Mar. Julio A. Roca 953, Punta Arenas. T: +569 59364759
• Café Inmigrante. Quillota 599, Punta Arenas. T: +5661 2222205. @cafe_inmigrante
• La Marmita. Plaza Sampaio 678, Punta Arenas. T: +5661 2222056. @lamarmitarest
• Kiosco Roca. Julio A. Roca 875, Punta Arenas. T: +5661 2223436. @kioskorca
• El Patagón. Villa Tehuelche s/n Laguna Blanca. T: +569 66280068.
• Café Kau. Pedro Montt 161, Puerto Natales. T: +5661 2414611. @kaupatagonia
• Los Coigües. Carlos Bories 221, Puerto Natales. T: +569 47814499. @cheffusionnatales
• Singular. Km 5, 5 Norte s/n, Puerto Natales. T: +5622 23068800 @thesingularhotels
• Vinnhaus. Manuel Bulnes 499, Puerto Natales. T: +569 82692510. @vinnhausnatales
• La Guanaca. Magallanes 167, Puerto Natales. T: +5661 2413245. @laguanacapizzeria
• Bar Last Hope. Esmeralda 882, Puerto Natales. T. +56 9 72018585. @LastHope_Distillery